Región: África Central
Zona horaria: UTC+03:00
Idioma: swahili e inglés
Moneda: Chelín tanzano (TZS)
Visado: VISA on arrival (90 días)
Enchufe: D/G
Sentido de circulación: izquierdo
Cuándo ir: de jun-ago (temporada alta) y de sep-feb (temporada media).
Cómo llegar: en avión hasta Dar es-Salam o hasta la capital de Kenia (Nairobi).
¿Por qué viajar a Tanzanía y Zanzíbar?
Tanzania y Zanzíbar en 20 días; fauna salvaje, paisajes inolvidables, el imponente Kilimanjaro nevado, playas idílicas y sus múltiples culturas fascinantes. La vida salvaje y rural se lleva al ritmo de pole pole (sin prisa) y hakuna matata (sin problema). ¡Así es Tanzania!
Todo esto sumado a que la costa del océano Índico también es mágica, gracias a sus espectaculares aguas turquesa y su vida marina.
Un viaje que nunca vas a olvidar. Tanzania reúne lo mejor para disfrutar de tu primera experiencia en África. ¿A qué estás esperando?
Adéntrate en su territorio
Justo aterrizar en el aeropuerto de Dar es-Salam, ya te das cuenta de que el rollo es otro. Mente abierta y dispuesta a sentir y ver como si de otro mundo se tratase. La ciudad brinda un esplendor de crecimiento gracias a las inversiones europeas, aunque aún quedan muchas partes sin asfaltar y zonas en las que es mejor ir con cuidado.
Pisar Dar es-Salam solo te servirá para poder encontrar la mejor opción de transporte hacía lo que viene siendo el mundo safari, o en el caso de que decidas visitar Zanzibar.
Moshi es la primera destinación, dejando atrás 10h de recorrido en coche o en autobús (la opción más económica). Empezarás a adentrarte en la zona del majestuoso Kilimanjaro. Siempre que sea posible a nivel económico, es recomendable viajar en avión, ya que los trayectos por Tanzania en bus son lentos.
El Kilimanjaro, la cima de África
Es el techo del continente africano. Tiene 3 cimas; Kibo, Mawenzi y Shira, siendo Uhuru Peak en el cráter Kibo, el punto más alto con 5.895m. Hay quienes por tiempo (mínimo 5 días) y por ilusión se atreven a hacer su ascenso. Hay 4 rutas principales, y siempre es mejor hacer la ascensión acompañado por guías autorizados.
Si optas por no subir a la cima, puedes descubrir toda la zona de sus alrededores y hacer noche por ahí. Plantaciones y pueblos de etnia chaga, hoy en día convertido en un museo al aire libre. Además, un montón de fauna y flora, cada una con sus propiedades. Tras un breve paseo, descendiendo por una ladera, llegaremos a la Cascada de Marangu, donde podremos darnos un baño.
Parques Nacionales en Tanzania
Hay muchos por ver. Lo ideal es dirigirse a la puerta de entrada a los populares circuitos de safari, Arusha.
Hay la opción de contratar safaris privados que te cubre todo el pack o intentar hacerlo por “libre” como fue en mi caso. En Moshi hay un alojamiento muy económico que se llama Kilimanjaro Mountaintop homes & camps y lo gestiona un muy buen amigo llamado Amani Maletho. El te ayudará a montar tu expedición a la selva, por un precio más económico (os doy permiso para que le regateéis un poco el precio).
Personalmente, la opción escogida por tiempo y dinero fue visitar el Ngorongoro Conservation Area, Tarangire National Park y Lake Natron. Además, tuve la suerte de adentrarme en la reserva de los Masái Mara y ascender al volcán sagrado Ol Doinyo Lengai.
Lake Natron y Ol Doinyo Lengai
Todo terreno, provisiones y tienda de campaña para vivir 4 días por ahí, cámara de fotos para capturarlo todo y un guía que te acompañe. La primera parada desde Arusha fue un campamento cerca de la montaña sagrada Ol Doinyo Lengai. Objetivo: coronar su cima por la noche (para evitar las horas de sol). La ascensión se inicia a las 12 de la noche y se llega un poco antes de la salida del sol, pudiendo disfrutar de unas vistas espectaculares. La ascensión no es para expertos, pero hay que tener una buena condición física ya que luego son unas 4/5 horas para bajar. Después de la super experiencia, toca dormir.
Una vez descansados, ruta hacía Lake Natron. Es un lago salado localizado en la frontera entre Tanzania y Kenia y repleto de flamencos. El reflejo de estos juntamente con la sal, provoca que a veces se vea con una tonalidad rojiza (no siempre). Tanto de camino de ida como de vuelta, irás observando mucha vida salvaje, ¡así es Tanzania!
Al acabar, finalizamos el día de nuevo en Arusha.
Área de conservación Ngorongoro
El día siguiente, rumbo hacía el Área de conservación Ngorongoro, al este del Serengeti y a unos 160km al oeste de Arusha. Una enorme extinta caldera volcánica de increíbles dimensiones se hunde tierra abajo y da cobijo a 30.000 mamíferos y un lago, el Magadi. Es un jardín del edén que registra la mayor densidad de depredadores del continente, con un montón de especies. Es el lugar del mundo en el que se pueden ver los llamados Big Five (los cinco grandes: búfalos, leones, leopardos, rinocerontes y elefantes). Lo puedes visitar en uno o dos días (depende la suerte que tengas en lo que veas).
Tarangire National Park
Por último, el elegido fue el Tarangire National Park, se encuentra a poco más de 100km de Arusha y su temporada ideal de visita es de junio-septiembre. En esta época seca millares de animales llegan en busca del curso de agua en este parque. Destaca también por su numerosa población de elefantes todo el año, su riquísima avifauna y sus serpientes pitón trepadoras.
Hasta aquí lo que viene siendo la parte más salvaje y animal de Tanzania. ¡Pero eso no es todo!
Aunque nos toca volver desde Arusha hasta Dar es-Salam de nuevo, unos días en la preciosa isla de Zanzibar.
Oasis de calma en Zanzíbar
También llamada Unguja, es una isla con playas impresionantes de arena blanca, agua color turquesa y mucha vida marina. Conocida como la isla de las especies, los grandes aventureros del siglo XIX, la eligieron como punto de partida de sus expediciones hacia el centro de África.
En la terminal de ferrys de Dar es-Salam salen ferrys por unos 35$ y 2h de trayecto. También hay la opción más cara de pillar un vuelo de 20min. Sea como sea, deberás pasar por un pequeño control de pasaporte y de equipaje.
Stone town
El ferry te deja en Stone town, pequeña capital arabe-shwahili de la isla, donde puedes quedarte como mucho un par de días. Aires multiculturales, mezquitas y otros colores. Declarada Patrimonio de la Humanidad, es una ciudad de piedra con bonitas puertas de madera esculpidas a mano con formas geométricos, florales y frases del Corán.
Lo mejor es perderse por sus calles del casco antiguo, que con mucha pena se cae a pedazos... ¡No te olvides de parar en la casa que nació Freddie Mercury!
Puedes aprovechar la misma mañana para ver el Mercado de Darajani de frutas y especies y la zona turística que homenajea a todo lo que queda de su pasado esclavo.
Por la tarde puedes tomarte un fruitshake/helado viendo la puesta de sol en el paseo marítimo y cenar algo en el mercadillo Forodhani Food Market. ¡Comida callejera y pescado fresco (no del todo barato)!
Al día siguiente puedes visitar la Reserva de tortugas de Aldabra en la Isla Bawe. A solo media hora en bote desde Stone Town, una isla repleta de tortugas terrestres te espera.
Ruta por la isla
Una vez pasada la mañana ahí, poco más te va a quedar por ver de Stone Town. Así que, en mi caso, lo mejor fue alquilar un pequeño 4x4 y empezar a recorrer la isla (la comunicación es buena, aunque no tanto el estado de sus carreteras). Durante todo el recorrido por la isla podrás ver el espectáculo visual que tiene una isla con mareas.
La primera parada fue Nungwi, en el norte del todo de la isla, con sus maravillosas playas. Aquí la marea no baja tanto como en el sur. Podrás descansar, bucear y disfrutar de una bonita puesta de sol.
La siguiente parada es Kiwengwa Beach y disfrutar buceando en su Atolón Mnemba de coral. Una vez vista la zona lo mejor es dirigirse hacia la costa suroeste. De camino, si tienes tiempo, conoce a los monos colobos del Jozani Chwaka Bay National Park por 8$.
Y si tienes dinero, no te puedes perder comer en el restaurante más original que había visto hasta el momento, The Rock Restaurant Zanzibar en Pingwe Beach.
Para acabar la ruta lo mejor es ir hasta la punta de Kizimkazi, ¡donde podrás pasar el día y nadar entre delfines en libertad! Luego tocará volver Stone Town y luego hasta Dar es-Salam para finalizar nuestra primera bonita historia en un país africano.
Hasta aquí mi recomendaciones de qué ver y hacer Tanzania y Zanzíbar en 20 días por libre, uno de los países africanos más amigables y protagonista de uno de los más impresionantes espectáculos de la naturaleza. Un destino único situado en la costa este de África Central en el que millones de cosas te quedan por descubrir.
No dudes en consultar mis recomendaciones en cuanto a dudas de vacunas y visado se refiere.
El Pilau es un plato popular, hecho de arroz aromatizado con canela y el Mishikaki es una barbacoa de carne muy común, que se suele encontrar en bares/restaurantes. Mientras que en Zanzíbar son apreciados los platos suahilis, como el pescado y marisco sazonado con leche de coco y especias.
La Zona de conservación de Ngorongoro es el mayor cráter con caldera completa en el mundo, con unos 260 km².
Aunque la lengua oficial es el Swahili, seguida por el inglés, en el país se hablan más de 120 idiomas o dialectos.
La cultura predominante en Zanzibar es la musulmana, y eso significa que los europeos estamos en sus playas paradisíacas.