Región: Sudeste Asiático
Zona horaria: UTC+08:00
Idioma: malayo es el idioma oficial, siendo el inglés un idioma muy usado
Moneda: Ringgit (MYR)
Visado: No (90 días)
Enchufe: G
Sentido de circulación: izquierdo
Cuándo ir: diciembre hasta finales de enero, y desde junio a agosto.
Cómo llegar: hasta el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur, Tailandia o Singapur
Malasia es de esos países menos conocidos del Sudeste Asiático, pero con el mismo encanto que sus países vecinos. Está compuesto por dos regiones separadas por el mar de la China Meridional; por una parte la región peninsular, limitada por Tailandia y Singapur, y por la otra, Malasia Oriental que cubre la zona norte de la isla de Borneo y limita al sur con Indonesia y al norte con Brunéi, al que rodea.
Playas, animales, selvas, historia, contrastes y diferentes culturas en el mismo país. Así que el resultado es tan atractivo que es imposible no dejarse atrapar por Malasia. Además la sensación que tienes por parte del pueblo malayo es simpatía, tranquilidad y mucho amor.
Es un viaje que puedes visitar tanto en transporte público o alquilando un coche, ya que las carreteras son magnificas.
Si tu elección es la región peninsular, puedes acceder al país llegando a la capital Kuala Lumpur o a través de Tailandia o Singapur. En mi caso, escogí llegar a Singapur y aprovechar para visitarla un par de días.
¿Primera vez en Malasia? Tus vacaciones empiezan aquí.
Melaka y sus restos coloniales
Coger un bús desde Singapur (Queen Street Bus Terminal/Singapore-Johore Express Terminal) hacía Melaka (4h incluyendo cruzar la frontera entre países). La estación central de autobuses (Melaka Sentral) está en Peringgit. Está a 45min y tanto puedes ir en taxi como coger un autobús al otro lado de la estación que te deja en el centro, en Tower clock.
Atravesada por un río, es una ciudad muy fácil de recorrer andando o en un trishaw, ciclotaxis adornados con flores y con equipos de sonidos.
Día 1
Lo que llama más la atención es la Plaza Roja (Dutch Square) y sus alrededores. El Stadthuys (plaza del ayuntamiento), la Iglesia Anglicana de Cristo (Christ Church), la Torre del reloj (Tower clock) y la fuente de la Reina Victoria.
La plaza también es bonita verla de noche cuando las luces se encienden y te transportan al pasado colonial de la ciudad.
Malayos, chinos, indios, holandeses, portugueses e ingleses forjan su carácter multicultural. Protegida como Patrimonio de la Humanidad, sus edificios coloniales se fundaron en 1401.
Su cara más cristiana se refleja en la iglesia más antigua del sudeste de Asia, la Iglesia St.Paul, ubicada en la cima de St. Paul's Hill. Fue construida en 1521 por los portugueses y luego fue usada como cementerio cuando la ciudad fue conquistada por los holandeses.
En cuanto a las otras religiones, visita la Mezquita Kampung Keling y la Mezquita de Masjid Selat. Esta última alejada un poco del centro y en tierra abierta al mar. Muy recomendable verla con la puesta de sol o de noche (no se puede visitar su interior si no eres musulmán).
Finalmente el templo chino budista de Cheng Hoon Teng, que practica los tres sistemas doctrinales: budismo, taoísmo y confucianismo.
Día 2
A nivel de ruinas, la Puerta de Santiago (A Famosa) sigue conservando algo de lo que fue el fuerte construido por los portugueses para defenderse de los ataques de los holandeses. Visítala temprano para evitar la masa de turistas.
También por la zona del famoso hotel 'Costa do Rio' hay un museo marítimo en forma de barco, para conocer el asentamiento de los portugueses siglos atrás.
Pasea por ChinaTown, con sus construcciones de estilo chino y prueba sus exquisitas comidas. Asimismo, Little India para comer en los Mamak (restaurantes Indios-Musulmanes) y visitar las coloridas tiendas de ropas.
Además, la calle más importante de la ciudad, Jonker Street, está llena de tiendas y en la que puedes probar el Cendol (postre popular) en Jonker Desert 88.
Una vez finalizada la visita te puedes dirigir de nuevo a Melaka Sentral, donde se puede coger un autobús hasta Kuala Lumpur con una duración de 2h por 10RM.
Kuala Lumpur, la capital de Malasia
Es la capital de Malasia, con brillantes rascacielos, arquitectura colonial y mil zonas encantadoras. En malayo, Kuala Lumpur significa “confluencia fangosa”, ya que se ubica en el punto donde confluyen los ríos Klang y Gombak.
Tiene una mezcla de diferentes culturas que incluyen malayos, indios, chinos, euroasiáticos y otras razas indígenas de Malasia oriental y la península malaya.
Para poder captar el choque de culturas recomendaría andar, a no ser que sean distancias muy muy largas, que hayan niveles altos de contaminación o que haga mucha humedad. Hay mucho por ver, así que para poder disfrutarla recomendaría unos 3 días.
Día 1
Primer día intenso. El recorrido empieza por la plaza más representativa, la Plaza Merdaka (plaza de la independencia). En ella se encuentra el precioso edificio del Sultán Abdul Samad (1897), con una bonita torre de reloj y dos torres con cúpulas de cobre. También se encuentra el Museo de Historia Natural, el Royal Selangor Club y Masjid Jamek (1909), otra preciosa mezquita a la que los no-musulmanes tienen prohibida la entrada. De noche la iluminación de toda la plaza la hace mágica.
Al otro lado del Río Klang empieza Chinatown. En el encuentro de Jalan Petaling y Jalan Sultán está la entrada oficial. La calle Jalan Petaling es un mercadillo con tenderetes repletos de productos falsificados a buen precio y con posibilidad de regatear. En todo el barrio encontraras restaurantes y puestos de comida callejera.
Ojo que los vendedores chinos tienen un código entre ellos y si eres buen regateador de precios te dan una bolsa naranja, mientras que si no lo eres te la dan de color rosa fucsia.
A poca distancia se encuentra el Central Market de Kuala Lumpur. Abierto desde 1888, hoy en día conserva su aire añejo y colonial. Abierto todos los días, la entrada es gratuita y lo mejor es el ambiente que hay alrededor.
En sus alrededores se encuentran 3 templos dignos de ver. Por un lado el templo hinduista Sri Mahamariamman Temple (1873), el más antiguo de la ciudad con una fachada principal repleta de 228 dioses hindúes de colores custodiando la entrada. Y por el otro lado encontramos los dos templos taoístas, como el Guan Di Temple (1888) y el Sin Sze Si Ya Temple (1864).
Si sigues hacía el sur encontrarás Brickfields, el Little India de la ciudad, donde poder conocer un poco más la gran colonia hindú de este país.
Día 2
El triángulo dorado es el centro empresarial y comercial de la ciudad con rascacielos, hoteles de lujo y bastante vida nocturna. En él están las Torres Petronas y una de las calles más animadas de la ciudad, Jalan Bukit Bintang con tiendas de moda, bares y restaurantes. Si tienes mucho dinero no te preguntaras si subir o no a las torres, pero si no dispones de mucho presupuesto y dudas entre las Petronas o Menara KL Tower, te diré que yo me decanté por la segunda ya que puedes disfrutar de una súper panorámica de la ciudad y del skyline con las Petronas y además hay un Sky Box (no apto para gente con vértigo).
Sea la que sea a la que subas, como si decides no subir a ninguna, igualmente recomiendo visitar los alrededores tanto de las Petronas como de la Menara KL Tower, ambas a 10min en taxi o media hora caminando.
Si quieres un poco de tranquilidad junto a las Petronas hay el KL city Park con especies de flora difíciles de encontrar, casi 2.000 árboles autóctonos, una pequeña mezquita y un lago.
Jalan Alor es una buena zona para visitar a la caída del sol. Ideal para cenar y probar comida local. Antiguo barrio rojo de la ciudad, se ha convertido en una llamativa calle atiborrada de gente, sinónimo de buena comida.
También hay la famosa avenida Changkat Bukit Bintang llena de singulares restaurantes de cocina internacional auténtica y fusión. En mi caso un poco saturada ya de fideos y más fideos escogí pegarme un capricho de cena comiéndome una súper pizza en Ciccio Pasticcio a 5min andando.
Día 3
Lo ideal sería dedicarle medio día a ver el Chow Kit Market en el barrio de Chow Kit. En él encontrarás verduras de todo tipo, pescado vivo y lo más impresionante como las enormes cabezas de vaca recién cortadas. Ese olor intenso que todo lo rodea unido al suelo de madera resbaladizo por el agua y los vendedores fumando o durmiendo. De día y de noche toman protagonismo los puestos de comida de muy variada procedencia.
Batu Caves
La entrada es gratuita, apenas a 15km de KL y el tren sale desde la estación KL Sentral, la principal estación de transporte de Kuala Lumpur. Una vez en KL Sentral, buscar el KTM Komuter Sentul con destino Estación Batu Caves (última de esa línea) y el pasaje son solo 2RM por persona ida y vuelta, con un viaje de unos 30 min.
Al acercarnos se puede ver la gigante estatua Murugan y la escalinata hasta la cueva, 272 escalones tallados en piedra.
Todo el lugar está infestado de monos, y ojo, porque son muy vivos y rápidos! Ven algo que les llama la atención, sobre todo comida, y en medio segundo te lo sacan.
Una vez en la cima, hay la boca de una cueva gigante y dentro de ella hay varios templos, más escaleras, y rituales que se practican ahí mismo.
Lo que realmente vale la pena de lo que es una atracción turística es la llamada Dark Cave. Un recorrido con linterna por 800 metros dentro de las cuevas. Se ven varios insectos en el interior y también murciélagos (viven 200.000 de ellos). Las formaciones rocosas son increíbles. Precio alrededor de 80RM por persona y el tour dura 45 min.
Taman Negara
Bosque tropical de 130 millones de años de antigüedad. Kilómetros de espesura tropical atravesados por varios ríos y pobladas de cientos de especies de insectos, aves, mariposas y, por supuesto, reptiles y serpientes y algunos tigres.
Puedes contratar previamente una excursión de todo el día como ofrece Kuala Lumpur Travel Tour con un precio de 450RM/persona o al llegar ahí contratar algunas de las posibles rutas. Desde una caminata por los adentros de la selva, el Canopy Walk más largo del mundo o conocer tribus de nativos de Orang Asli.
Si tu idea es hacer ruta y necesitas dormir en algún lugar, sus alrededores o Jerantut son una buena opción.
Tioman Island
Esta isla tiene una riqueza salvaje en forma de animales y un fondo marino con una visibilidad espectacular. Es excelente si quieres desconectar y sentirte conectado con la gente de la isla (poco habitada).
Tu destino es Mersing y más concretamente Jetty. Coge el ferry a Tioman por 70MR (ida y vuelta). Incluye la tasas de entrada al parque marino y tarda hora y media. Debido a que la isla depende de mareas, hay que confirmar horario con la compañía. El billete lo puedes comprar ahí mismo y no es necesario mucho tiempo de antelación (¡por un imprevisto llegué 5min antes!).
Hace 5 paradas: Paya, Tekek, ABC, Panuba y Salang Jetties.
Ten en cuenta que no puedes trasladarte por la isla si no es en taxiboad y solo hay un cajero automático.
La excursión “Coral Island Trip” cuesta unos 100MR y es un must. En cualquier punto de la isla encontraras a alguien dispuesto para contratar una excursión hasta las 15h.
Las pistas de trekking no faltan. Uno de los más famosos el de Tekek a Juara (unas 2h) o el que va desde Tekek hasta Monkey Bay. Nenek Semukut, los picos gemelos. También existen dos cascadas: Asah y Mukut.
Ante todo no te sorprendas si en algún momento te cruzas con un lagarto de medio metro llamado Varano gigante. Son carroñeros y carnívoros que en "principio" no atacan a los humanos.
Si te apasiona la naturaleza y siempre quisiste aportar tu granito de arena, podrás hacerlo apuntándote al Juara Turtle Project. ¡Podrás ayudar y aprender más sobre las tortugas!
Se dice de la existencia de sandfly, aunque por lo que vi, en las pocas zonas habitadas se encargan de rociar las playas. No está de más llevar aceite de coco para tener la máxima protección ante ellas.
Cruzar la frontera entre Malasia y Singapur
Puedes cruzar la frontera fácilmente y con cualquier tipo de transporte. Si viajas en bus, casi todos las empresas de pasarán a través del punto de control Singapore Tuas y luego entrarán en el punto de control de Malasia cerca de Gelang Patah. Los pasajeros deberán bajar del autobús descargando su equipaje. Después de eso, los pasajeros volverán a subir al mismo autobús para continuar hacia Malasia. En el caso de la frontera con Malasia, los viajeros deberán bajar nuevamente para el control de pasaportes y deberán bajar su equipaje para un escaneo, una medida de seguridad que impone el país.
Este trámite tarda al menos una hora para pasar la frontera de Singapur a Malasia y luego, una vez en marcha, tendremos otras más de 3h hasta Melaka o 4h y media hasta Kuala Lumpur.
Si tiene muchos más días puedes dedicarte a ver la zona de Borneo con sus salvajes parques nacionales o conocer a los orangutanes o “monos narigudos”, animales en grave peligro de extinción y quién sabe si en unos años va a ser posible seguir viéndolos en libertad.
- Entre todos los platos probados recomiendo el Mongolian Beef, Hokkien Mee (noodles fritos), Satay (famosos pinchitos de pollo/ternera acompañados por salsa de cacahuetes) y para los amantes de las gambas Salted Egg Yolk Prawns.
- Era lugar de paso de la antigua Ruta de las Especias, junto a Indonesia, Sri Lanka e India. Por lo tanto, es un paraíso para los amantes de las especias y la comida picante en general.
- Es uno de los países con mayor biodiversidad del mundo (contiene un 20% de las especies animales del mundo).
- En el metro y el tren hay vagones sólo para mujeres bien señalizados y está prohibido que los hombres permanezcan en él.
- Es un país muy musulmán y eso requiere adaptarnos lo máximo posible a sus costumbres. El alcohol no está bien visto depende del lugar y es caro, excepto en Tioman Island.
- En la mayoría de templos hay que dejar los zapatos fuera (ojo que no te los roben) y tapadas de hombros y rodillas especialmente en mujeres.